Las máscaras protectoras FFP2 (N95), también conocidas como máscaras anti-smog o anti-polvo, tienen un filtro especial contra la contaminación microbiana y se utilizan para filtrar las partículas más finas en el aire inhalado. Existen máscaras FFP2 disponibles en el mercado que filtran al menos el 95% de las partículas, hasta 0,6 μm, que flotan en el aire, lo que garantiza una alta efectividad contra microorganismos, bacterias y virus, así como para detener el humo, el polvo en suspensión y las partículas de aerosoles. Durante la pandemia de SARS-Covid19, también se recomienda usar máscaras FFP2 porque brindan una protección óptima (aunque no completa) para los médicos.
La norma europea EN 149 divide los respiradores filtrantes en las siguientes clases: FFP1, FFP2, FFP3, según el grado de protección garantizado. Cuanto mayor sea el tipo de protección FFP, más ajustada es la máscara y mejor protege nuestro sistema respiratorio. También hay máscaras desechables y reutilizables.
Al elegir una máscara protectora, vale la pena prestar atención a otras marcas:
Las máscaras se cierran originalmente en bolsas, lo que permite un almacenamiento conveniente.
Información detallada:
Review KN95, N95 (BFE ≥ 95%), producto chino.